Llevo días diciendo que no me quiero regresar a México, que estoy encantada en Madrid y que no quiero que se me acabe el viaje...
Hoy se supone que volvía a casa, ya estaba hasta mentalizada del avión, incluso del regreso al mundo real pero... tun tun tun.... ni madres, me quedo hasta mañana, o pasado.
Porque? por bruta básicamente, dejamos el boleto de avión sobre la mesa, y me di cuenta al llegar al check-in, caos, destrucción y mucho miedo, pero la señorita fue buena y se apiadó de mi y juró llamarme mañana para decirme que onda, y yo la amo y confío en ella.
Habrá sido por pendeja, pero yo la verdad creo que mi subconsciente se resiste desesperadamente a irse.